Conjunción de Saturno-Luna y Sol-Venus la Mariblanca

Los mitos nacen de forma popular y no todas las madrugadas podemos contemplar conjunciones tan completas y singulares. Donde

Saturno acompaña a la Luna y Venus, la Mariblanca, acompaña al Sol de la Puerta  que como anfitriona los presenta

Vangelis: Albedo 0.39

Peripatético madrugador  platicando solo a la entrada de la plaza

pues no siempre es la luna  llena la que afecta.

[Aquí en castellano]
Deberon pensar os que primitivamente imaxinaron os deuses que algún día confirmaríanse os seus pensamentos esquizoides e esperando diríannos canto desexaban contarnos que o seu inferno existe aínda que os seus devanceiros con mitras e casulas trabucaron onde nun principio situárono. Dende entón enfermaron, e iso contáxiase senón hai remedio ou antídoto. Propágase como a propaganda, validado pleonasmo, dos anuncios do que non semellando bo o sexa por tradición, costume ou falsidades multípleces. Metelo polos ollos é primordial, daquela o tempo xa dirá. Deberon pensar ou pensan os que hoxe preceden que agora se podería escudrinhar un luar mellor pra tan inalcanzábeis entes aos que idolatren e desexan que á forza, ou sen ela, os demais tamén os adouren por riba de tudo; pois non desexan nin permiten que, aínda que aturen de mala ganha que os estados protéxannos, o livre albedrío permítanos someter a vontade á razón e viaxe aos seus olimpos aposentos trala ponte da valhalla achegarnos a eles con telescopios e outros aparellos pra ver (pra (non) crer) que res hai máis aló nin tralo inicio; cando o daquela grande ºexplosión xenuina.

Coma dixo unha tarde un *amigo, encomencemos polo principio. É máis orixinal e xenuino. Semos química, amigo, ( e auga :)))´ dixeron no anuncio de bruce lee) somos produto desa enerxía e cando acábesenos a min deposítasme a extramuros de calquer necrópole, en luar máis que neutro, á marxe de casulas, albas, estolas e doutros paganismos, pra saudar aos cortexos novos e lembrar a propios e estraños que entre choros mancadelos véxame envolto, empático e deixe que pola minha gorxa baixe o sabro amaro da morrinha e a senhardade...doutros.

Deposíteme, non me cremen, nunha aldeia afastada de luces e alumados, fóra dos seus muros, si houbelos, pra non entrar nas sinrazons varias e tómenme por crédulo. Nada máis antes de entrar, onde crezan malvas reais e das outras...tolas ou vulgares...pro longas, fermosas. Onde aínda que me pisen soporte con humor cada pegada desconhecida; pois só desexo ver, espertando cada noite, as estrelas que hai enriba e chéguenme novas de novos achados que outros homes doutos, non coma eu, descobren cada día pra abraio de tudos. E pese a quen pese que tralo principio inicial, como xa dixo o devandito *amigo, non acóchase nin hai E/ente algún que posúa nas súas mans capacidade de procrear semellantes desencadenantes pois o que é imaxinado e, ademais, fóra real, só polo feito de selo xa sería medibel e pra nada mellor que tudo o que podemos ver tralas lentes de anteollos cósmicos seica cada vez máis potentes.

Son as súas inicuas de poder as que os moven a acaparar éticas e outras normas coas que manter o seu poder e dicidir por todos o que uns poden facer e outros non; claro que neles non reza tal máxima e facendo das súas capas saios burlan as súas tentacións ou vicios con confesións altísimas e propósitos de enmendas que aínda que non sexa verdade eles veña e dálle por si algún día tras tudas esas estrelas ou a través de centros ou buracos negros, ata materia escura, descobren que aínda lles queda espranza, a que nunca pérdese, onde achar á tan filosofal pedra das súas esquizofrenias autocomendadoras.

Descobrir o máis fondo eido galáctico é como, tombado boca enriba, apreciar o trapalleiro cheiro do rial do pasado afastado. Incerto futuro que fórmase con cada consecuencia nosa e que dende aquel periplo africán cada día somos máis fillos das estrelas ás que voltamos imaxinativamente en vida ou ao morrer, feitos po.

A min, si pódese, déixenme, pra non importunar con paroladas e rollos aos outros que repousan, fóra...Onde o meu livre albedrío razoe cada noite o que fun deprendendo.

Déixenme ante a tapia por si sacando uns botes dáme por facer un grafiti 

Engaiolante  luar ise núcleo enriba de Orión, arroleiros incluídos. Xa gostaría darme un garbeo, en moto, por il.d:D´

Cielo estelar del sueño de una noche de invierno en un sábado de enero a mitad de madrugada.

 º Big-Bang

*Ou mesmo eu

El grito...[l*unar que tanto estorba y molesta]

Pink Floid: Absolutely Courtains

Los motivos que las sinrazones tienen para demostrar lo inexistente e indemostrable son doblemente desproporcionadas a las mismas que las causas que no justifican ni las luchas ni las vidas perdidas.

Una persona sensible que sabe leer entre líneas del tiempo y entre la hierba que mecida por el viento descubre con amargura como los colores, los dibujos que destacan por simples, llamativos y de juegos infantiles son más que nunca motivos para trastornados censores...armados

Sólo el humor es y será barricada presente de un pesado pasado basado en el miedo...eterno.  La viñeta es crítica siempre y aceptarla es evolución social desde la que se aprenden a corregir aptitudes.

No hay consuelo para tan desconsoladas pinceladas huérfanas.

Y la LUNA puso el grito en el cielo.

Sin ªcordura no hay progreso si  éste es alentado  por venganzas del cacique de turno que lo ahoga constantemente.d:D´

Luna posiblemente teñida por la contaminación absurda que tapona pulmones y ciega la vista y otras perspectivas.
Nunca habrá progreso sino hay cordura producto de la ignorancia temperamental de primitivas ideas.

[*También lupanar
  ª Educación y conocimiento; arte de la prudencia y reflexión autocrítica]

Esperando regalos del dueño de la fantasía. Pastoreando la luna con tubos de cartón y aerosol de nieve.

Traffic: Dear Mr. Fantasy

No toda la ropa es de entretiempo ni tiene condición de uso, o se va a una cosa o a otra que, entre medias, siempre están los centros para realizar los cambios.

Mientras ellos ilusionados, con sus zapatillas de marca y sus calcetines tobilleros, danzaban sus nocturnos juegos alrededor de la luces que de sus móviles provenían. Y hablaban del miedo, temor a los coches que se acercaban o a asuntos de comisarías si los polis los pillaban entre escombros.

Siempre la misma historia, siempre el mismo tópico que se ciñe a las pocas palabras que empleaban aún sabiendo que el mayor y único peligro es al accidente. El juego se les hacía misterioso, de noche más divertido, pero la posibilidad de oír la voz adulta que los descubriese les daba mayor aliciente.

Jugar a descubrir, con los amigos, que lo que antes era propiedad privada hoy carece de valor y su escombro desmenuzado permite ver sólo la importancia del suelo.

Pastores de juegos modernos, eso piensan ellos, que esperan esta noche de sus sueños y aún sabiendo el porqué ansiosos dejan pasar las horas que, mañana, les permita sentir el calor del hogar que los cuida.

La historia infantil del juego repite la misma condena. Pasar con el menor ruido el rito para ser adulto. d:D´

Qué frío hacía.

Y sus templos otrora importantes, de cuidado, cementados y repletos polvos 

de calizas que contenidas en depósitos adyacentes termina por agotarse 

de la falta de consumo y su gran valor se desmorona como el vandalismo

que recicla cualquier cosa que esté a su alcance.

Es el abandono. Antes sacra oficina, de trabajo despacho

Hoy desaparece sin importancia.

Extravertida media luna al norte, astur; al inicio del año

El macizo que aparece iluminado a la derecha es el Cornión (macizo occidental de los Picos de Europa) el cual se diferencia 
en tres unidades, separadas por profundas gargantas. Los Picos, son un maravilloso bloque calizo  que sobresale, autónomo, 
en la Cordillera Cantábrica, como si de una geoda se tratara). El sol del invierno los  ilumina al atardecer y la caliza blanca, 
presumida ella, se viste con tonalidades guapísimas que van desde el rosa  al ocre, como si fuera un arcoíris particular...
Palabras gentileza de Belén Menéndez Solar.

Jethro Tull: Thick as a brick. Live 1978

Extraña y deportiva luna aguas abajo del Manzanares a su paso por El Tranco.
Universo  paralelo  que  confirma la atracción que la luna  por el deporte;
algo que no llegaré  a entender del todo.
Pedazo de meteorito que como un coche deportivo o de carreras se hizo bólido.
Meteórico bólido, flotando y de paso fugaz con la ingravidez que reporta el líquido.

Cuando la mente se perturba ante tanta luminaria se observa el reflejo del placer inconsciente.

Quisieras reflejar en tus ideales lo que la sociedad, al caer la noche, invita.

Ojalá, el supuesto fin, fuera así...d:D´

Saúde, Ceibedade e Esquilmo

Esta Luna, o luna, no sólo es fantástica sino que representa con total nitidez lo que uno ya desearía al retratarla. Y aunque no sea su cara oculta careciendo de espejo desde el que reflejárnosla sí lo parece cuando se vuelve nueva ocultándose luego para reaparecer, pasados los días,  en creciente.d:D´

Algo más completa, Selene, el día dos.

Pálida o enrojecida según la luz  Solar  o empolvándose de  *selenetud  cenicienta otras.

A veces velos troposféricos cúbrenla de timidez ajena, o más bien nebulosa censura desapacible; como las  leyes mordaza contaminadas nieblas de sombras, bombín urbano, sombrero de copa que copa error capitalino. Religiosamente pecado.

Pero si los vientos son bóreas, empujados por Europa, se abrirán claros que despejen desde el norteño anticiclón y a nosotros de toda duda. d:D´

Éstas que me envía su autora, representan con total nitidez lo que uno ya desearía por retratarla...

Sobre tierras de guerreros sumidos en su propio Medulio o Pindo, que ante las legio romanas trabaron agotadoras luchas antes que entregarse. Fueron de aquella comarca, amplia, de entre varios clanes de los arcaedunos, cantianos, corovescos o aroniacinos quienes enfrentados formaban  agrupados pueblos vadinienses. Astures, cántabros o ambos. 

La primera del año, que salió sobre la sierra de Amieva, esa vetusta tierra de hombres independientes y libres que en sus cercanas cumbres fenecieron antes de rendirse a las huestes romanas. d:D´

[*Color que la luna adquiere bien por su tono gris, bien por madura o vetusta. Senectud lunar. Neologismo propio]

Un feixe de lúas cheas, un feixe de saúdos neste aínda novismo dous mil quince.
Gracias Belén.