5/1/13

LOS TRES REYES...[La noche, más oscura]...En tierra de aluvión cuaternario.

[Luna revelada por Danikxt mostrando sus colores reales]




[A  la derecha la estrella HIP y Calisto.
A la izquierda Io, muy pegado. 
Ganímenes y Europa, ambos, en paralelo]


"...He visto cosas
Que vosotros no podíais creer
Naves de ataque ardiendo más allá de Orión
He visto rayos-C brillando cerca de la Puerta de Tannháuser
Todos esos momentos se perderán en el tiempo..." 
[Roy Batty, Nexus-6] 



Nebulosa M-42 a mil trescientos años luz de nosotros, en fugaz visita..


  Cuentos de Nocturnio y Alevosio IV:                                                            [aquí en galaico]

   La hierba que pisábamos indicaba cuánto podríamos estar con el material en lo alto del cerro; la hora acompañaba y prometía tranquilidad para la prueba de fuego, nuestra base óptica de propulsión a chorro - con parterre incluido - despegando más allá de la Luna, al cinturón de el cazador. Orbitando a su alrededor como polillas atraídas al brillo gris, la rodeamos para sacar el mayor partido de nuestra visita. Las tomas de rigor en su iluminada cara nos condujo la mirada a Júpiter del que seríamos expulsados con un tremendo impulso vagando nuestro destino final antes de que la madrugadora humedad se hiciera insoportable.
   Viajando por la M-42:  
Dos de enero del año entrante. Qué dos.
-"Si logras enfocar Orión a través del objetivo vendo y tiro con todo, es complicado con tanta luz"
   Así, con estas palabras comenzaba el viaje, esa búsqueda del invierno sidéreo. 
Limpiamente atravesamos, hacia la izquierda, un claroscuro firmamento y derrotamos entre risas  ese imposible espacio para cualquier gamela sideral. Con sólo pensarlo, los dedos, algo gélidos,  tomaron la iniciativa con  los giroscopios y se envalentonaron a discreción. 
-Dije con discreción, no a discreción. 
-Ah, vale...
   El timón de una mano contrariaba a la otra que hacía de las suyas un sayo; cuando vas al psicotécnico de conducir suele pasar algo parecido. De un escobazo arqueamos el viaje, comprimiéndolo, a mil trescientos años luz de nosotros la Cuña-Lanzamiento, a ese lugar distante donde se plasman estrellas, en la espada, desde hace millones. Qué viejo sería lo que estábamos viendo; aún no habíamos nacido y lo que nos llegaba eran anclados recuerdos de fotones seniles   enseñándonos su infancia; como un coágulo estacionario en la cabeza produciendo fallos cerebrales ¿En pañales estábamos viendo aquello? Espero que lo recuerden durante mucho más y veamos a esos astros vetustos contar sobre las más jóvenes de plasma su revoltosa forma de comportarse...
-Las jóvenes de mi tiempo eran más...
-Iguales, abuela Estrella, iguales que las actuales...
   Cuando las magistrales explicaciones de Dani se quedaron fijadas en mi aprendizaje, para entre tomas manejar la vuelta a casa, el rocío escarchado también se había fijado en nosotros dos y nos hacía guiños atmosféricos.
   Cerramos los ojos de buey, regresamos y, recogidos los bártulos, descendida la loma nos esperaba el calor del "*Granhaiga".
En unas horas hicimos un viaje milenario con velocidad infinita que, como siempre, dura poco y sabe a menos.
Hala "pa casa", hombre!
[d:D´]
[*Redundancia]
Aforismo propio:
"Cuánta memoria concentra la luz para dejarnos ver en el presente y presentarnos el pasado; sólo lo nuestro es senil cuando olvidamos la historia. Demencial"